El Gobierno nacional rechazó el informe de la financiera estadounidense JP Morgan, según el cual el Estado Plurinacional junto a Venezuela son "los peores de la región" en materia económica, ya que ambos encabezan la lista del "riesgo país" elaborada por la misma empresa para la región. El Ministerio de Economía de Bolivia respondió a esta entidad y mostró con datos que la tempestad anunciada para Bolivia no es tal.
Para el analista Omar Velasco se trataría de otra operación comunicacional dirigida a perjudicar el desarrollo económico de Bolivia. Prueba de ello es que actualmente el riesgo país es de 1.942, mientras en septiembre pasado llegó a 2.300 puntos.
"En ese sentido, esta noticia de JP Morgan difundida por el portal Bloomberg tiene un determinado sesgo al salir en este contexto, al cierre del año. En todo caso, la noticia debería ser que desde septiembre hasta ahora el riesgo país de Bolivia bajó 400 puntos básicos", dijo Velasco a Sputnik.
En cambio, estas entidades "anticipan una devaluación inminente o una moratoria de la deuda". Pero en el caso de los pagos de créditos internacionales, "el Gobierno ha logrado salir del paso, pese a la escasez de dólares", indicó Velasco. Y explicó que en 2024 se tenían que pagar en este ítem más de 1.500 millones de dólares, de los cuales "hasta ahora ha logrado abonar más del 90%".
Por ello, el analista consideró que "estos anuncios alarman de manera desmedida sobre la situación financiera a corto plazo. Pero, de todos modos, aún no se ha resuelto el problema del déficit fiscal, entre otras cuestiones a mediano plazo latentes" que debe enfrentar el Gobierno de Arce.
Mediante un comunicado, el Ministerio de Economía boliviano se posicionó ante las críticas de JP Morgan. Primeramente explicó que las economías de la mayoría de los países del mundo están afectadas: "El entorno internacional, caracterizado por tensiones geopolíticas, el encarecimiento de las cadenas de suministro y la desaceleración económica mundial, han impactado a todas las economías, incluida la boliviana".
En el caso del país latinoamericano, hubo un plus de afectación por el enfrentamiento del Gobierno con el expresidente Evo Morales (2006-2019), quien intenta postularse a un nuevo mandato presidencial en 2025 a pesar de que la Justicia boliviana manifestó que ya no estaría habilitado para ello.
"Se suman los bloqueos y protestas internas, motivados por intereses personales y políticos, los que generaron un costo significativo para la economía boliviana. Estas acciones, lejos de contribuir al desarrollo del país, afectaron directamente el comercio, el abastecimiento interno, además de generar una imagen negativa del país hacia la comunidad internacional", aclaró el ministerio a cargo de Marcelo Montenegro.
"Solo el bloqueo impulsado por el expresidente Evo Morales, entre octubre y noviembre de este año, generó una afectación económica de más de 2.200 millones de dólares. A lo que se suma el bloqueo en la aprobación de créditos externos por más de 1.200 millones de dólares en la Asamblea Legislativa Plurinacional", agregó el comunicado.
Pese a los problemas "internos y externos, Bolivia ha mostrado un desempeño económico que mantiene crecimiento con estabilidad. El crecimiento económico del 3,1% en 2023 y del 2,6% al segundo trimestre de 2024 demuestra la capacidad del país para mantener una trayectoria positiva, incluso frente a adversidades".
Sobre las Reservas Internacionales Netas de Bolivia, el Ministerio informó que "se incrementaron respecto al cierre del año anterior, alcanzando los 1.905 millones de dólares en agosto de 2024, comparado con los 1.709 millones de dólares registrados en diciembre de 2023".
A la luz de estos datos, Velasco evaluó que "las calificadoras tienden a sobredimensionar, se anticipan en exceso al hipotético deterioro de la situación financiera. Eso termina afectando, porque hace que suba el riesgo país de forma muy anticipada. Ese es el reclamo del Gobierno boliviano expresado en el comunicado".
Para Velasco, "el crecimiento económico viene de más a menos. Hay una desaceleración de la economía. Pero lo que pasa normalmente con los organismos con esa metodología conservadora es que vienen a penalizar el crecimiento de países en desarrollo. No es un tema solo para Bolivia".
Según las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Producto Bruto Interno (PBI) de Bolivia crecería un 1,6% este año. Pero hasta el primer semestre aumentó en un 2,6%. Según Velasco, al finalizar 2024 podría rondar el 2%.
Esta cifra está influenciada por las últimas protestas sociales lideradas por los seguidores de Morales, quienes entre el pasado octubre y noviembre mantuvieron por 23 días las principales carreteras bolivianas bloqueadas.
Para el analista, los sectores políticos deben esforzarse de modo que en 2025 "estos factores de inestabilidad política y convulsión social" no condicionen el crecimiento del país.