En reunión posterior con los gremios, la Intervención decidió aplicar dicha medida preventiva, al menos hasta el día lunes próximo, oportunidad en la cual solo se cubren los servicios esenciales de mantenimiento.

La excusa de las autoridades de la empresa es que, como YCRT se encuentra con una parte del personal licenciado desde diciembre/2021 y otros tantos saldrán de vacaciones en los próximos días, se aplica el plan preventivo de reducción de personal, lo cual implica que YCRT seguirá sin producir, quien sabe hasta cuándo, esta vez con la excusa del contagio Covid-19 a pesar de que más del 90% del personal está vacunado con dos y tercera dosis.

Increíblemente YCRT no tiene al Covid-19 dentro del calendario de vacunación obligatoria; por este motivo las autoridades deben solicitar “la colaboración del personal” para que envíen la constancia de vacunación respectiva. Esto genera una extraña situación en la relación patrón/empleado, pues la sola decisión del operario de no asistir “por prevención” es materia suficiente para que nadie pueda exigirle asistencia, aún cuando tenga todas las dosis de las vacunas cumplimentadas.

Es decir que YCRT, empresa que al menos hace más de dos años no produce nada, produjo el año 2021 15 millones de pesos e insume anualmente 7 mil millones de pesos en salarios y beneficios, presupuestados y conocidos en la última declaración que hizo pública el diario Clarín, salió de un conflicto de meses, inició las vacaciones del personal hasta el mes de febrero/marzo y en este momento va a trabajar quien quiere, porque no les pueden exigir la constancia de vacunación.

Recordemos que los sueldos del personal jerárquico, de Jefes y Directores para arriba, superan los 250 y hasta 380 mil pesos de bolsillo. Esta empresa debe ser la encargada de abastecer a la Usina de 240 Mw del carbón necesario para funcionar; pero para este objetivo YCRT debe producir anualmente la cantidad de 1.200.000 toneladas de carbón, algo que actualmente es ciencia ficción, sin ninguna duda.

En otros emprendimientos mineros, pero del orden privado, los operarios de los yacimientos, al igual que en el petróleo, tienen la obligación de exhibir y registrar el programa de vacunación con una, dos o tres dosis. De hecho en Cerro Vanguardia, el sindicato está denunciando que hacen trabajar a gente que podría estar contagiada.

Lo que en la actividad privada aparece como un signo de abuso, es explicado en las Cámaras respectivas, señalando que el Covid llegó para quedarse, la actual cepa (Ómicron) no es letal, ni siquiera peligrosa, se ha masificado, quien la tiene solo con transitar los días aislados es suficiente profilaxis y de esta manera, exceptuando a los positivos declarados, las mineras exigen a todo el resto del personal,, que asista a trabajar, presentando el programa de vacunación respectivo.

En YCRT nada de esto es válido ni exigible y la única explicación posible es porque se trata de una empresa del Estado, donde las obligaciones de producir, son significativamente menos importantes que atender a los privilegios de quienes forman parte de una elite que insumen super millonarios presupuestos y no entregan nada a cambio. (Agencia OPI Santa Cruz)