Sputnik conversó con el inversor ruso en monedas digitales Alexandr Kitchenko sobre las futuras oportunidades y amenazas para estos activos electrónicos y el propio bitcoin. A diferencia de las criptodivisas tradicionales, como el bitcoin, los stablecoins son criptomonedas sostenidas por las reservas de divisas tradicionales y las materias primas, como el oro o el petróleo. A comienzos de enero, la capitalización bursátil de todos los stablecoins aumentó 4.000 millones de dólares en tan solo 12 días hasta situarse en 33.500 millones. El stablecoin tether, sostenido un 20% por la moneda estadounidense, se atribuyó más de 2.000 millones de dólares. Se trata de una suma enorme, sobre todo si se toma en cuenta el escándalo que se produjo después de que un grupo de inversores demandaran a la empresa Tether Limited por haber lanzado en circulación unas fichas USDT sin respaldo por 3.000 millones de dólares. Hubo varias demandas y una de estas fue presentada por la Oficina del Fiscal General de Nueva York en abril del 2019 y se espera que el proceso avance hacia un desenlace el 15 de enero de 2021. Según el último anuncio del Fiscal General de Nueva York, se supone que la compañía que gestiona el tether completará el 15 de enero la entrega de los documentos del préstamo relacionados con el supuesto encubrimiento de 850 millones de dólares entre Tether y la plataforma de cambio Bitfinex. Hoy en día distintos analistas especulan que este escándalo pueda tener implicaciones masivas para el bitcoin. Sputnik conversó sobre el tema con el inversor ruso en criptomonedas Alexandr Kitchenko. El experto recordó que cada vez que en el mundo se registra el crecimiento del precio del bitcoin aparece este tipo de noticias, como la relacionada con el USDT, sus dificultades y que realmente no se sostiene por ningún otro activo, tal y como lo aseguran sus creadores. Tras las publicaciones de estos informes, su cotización suele bajar y algunos inversores se aprovechan de ello para vender sus bitcoins por un precio más alto y comprar stablecoins. Si bien es posible que un día estas amenazas se hagan realidad, ahora "son nada más que rumores", destacó. "Si algo le sucede al USDT, existen otros stablecoins, más regulados. Las bolsas los están utilizando y estos problemas no conducirán a ningún tipo de colapso en el mercado", subrayó. Kitchenko destacó que la incertidumbre política en EEUU fue uno de los factores que impulsaron el crecimiento en los últimos meses de los precios del bitcoin, así como los de otras criptodivisas. No es un secreto que el candidato demócrata Joe Biden, que ganó las elecciones presidenciales en noviembre de 2020, aboga por subir los impuestos en el país norteamericano. "Esto no le va a gustar a los ricos. Naturalmente, querrán o ya han buscado trasladar algunos de sus activos a los que son más seguros y que están fuera del sistema bancario de EEUU. Y el bitcoin puede ayudarles en esta situación", señaló. Si un inversor transfiere una gran suma de dinero de un banco a otro, la entidad que lo implementa tiende a cobrar una comisión muy alta o incluso puede bloquear esta operación. A su vez, las plataformas que trabajan con bitcoins cobran remuneraciones mucho más pequeñas que son fijas y no dependen del monto transferido. Además, nadie es capaz de bloquear la operación, agregó. El experto asegura que los futuros acontecimientos políticos en EEUU podrán conducir a que un número cada vez más creciente de inversores cambie sus divisas tradicionales por las criptomonedas. Actualmente, el bitcoin es la principal moneda digital en el mundo y se atribuye el 69% del todo el mercado. Por lo tanto, todos estos factores apoyan la hipótesis de que su precio aumentará en el futuro, señala el experto. "Por supuesto que habrá retrocesos porque una parte de los inversores no elige al bitcoin para guardar siempre sus ahorros en este activo, sino que lo venden de vez en cuando para aprovecharse de su alta volatilidad. Pero desde la perspectiva global, no voy a cambiar mi pronóstico y creo que el precio de la mayor criptodivisa en el mundo crecerá", aseveró. Kitchenko espera que en el futuro el valor del bitcoin, que recientemente superó los 41.000 dólares por unidad, llegue a los 100.000 dólares. Pronosticar cuándo esto sucederá es imposible porque la situación puede cambiar rápidamente en función de los acontecimientos que tienen lugar en el mundo. Uno de estos podría ser la posible decisión de la Administración Biden de "desencadenar una nueva guerra" en Oriente Medio. "En este caso las cotizaciones se dispararían como mínimo hasta 60.000 dólares por bitcoin", señaló. Otro factor que pesará sobre el precio del bitcoin será la situación epidemiológica en el mundo. Si continúa siendo difícil, el bitcoin volverá a crecer respecto al dólar. Si los Gobiernos van a imprimir más dinero para rescatar a las empresas y a los bancos, repitiendo el escenario del 2008 que causó la aparición del bitcoin en el mercado, eso también será un factor de crecimiento para la criptomoneda, advirtió. "La emisión masiva de dinero utilizado para rescate tiende a disminuir el poder adquisitivo del dinero y usted, como usuario de esa moneda, se empobrece. En esta situación, el bitcoin actúa como una especie de activo refugio parecido al oro", comparó. Al mismo tiempo, Kitchenko agregó que la principal criptomoneda del mundo jamás adelantará al metal precioso porque no "se utiliza en la industria" para producir otros bienes. Sin embargo, reconoció que las tiene todas para llegar a ser el activo refugio número dos después del oro.