Ampliar
Hay que reconocer que todavía estamos muy lejos de los niveles de la pasada primavera en Francia: más de 1.600 pacientes con Covid-19 están hospitalizados en unidades de cuidados intensivos hoy en día, en comparación con los 7.000 que estaban en el punto álgido de la crisis.
Sin embargo, dado el carácter exponencial de la epidemia, las proyecciones a un mes vista son muy pesimistas y, en opinión unánime de los médicos, era necesario actuar lo más rápidamente posible. Por lo tanto, Emmanuel Macron decidió introducir un toque de queda, medida que se aplica en otros lugares del mundo, pero también en Francia. Ante un brote epidémico, se introdujo en junio pasado en la Guayana Francesa un drástico toque de queda, de las 17.00 a las 5.00 horas.
La eficacia de esta medida fue estudiada por investigadores del Inserm (Instituto Nacional de Investigación en Salud y Medicina de Francia), el Instituto Pasteur y el CNRS. Los resultados aún no han sido publicados en una revista revisada por pares, pero fueron puestos en línea el lunes 12 de octubre. (RFI)