Si tienes problemas para descansar cómoda y reparadoramente, quizás necesites la dieta del sueño. La dieta del sueño es un programa alimenticio enfocado en los alimentos que consumes a diario de modo que ellos se orienten a optimizar tus horas de descanso, y de prepararte mejor para ellas. Aquí explicamos qué alimentos incluye, y cuáles deberían ser excluidos. Alimentos para facilitar el sueño Algunos conjuntos de alimentos son imprescindibles para la dieta del sueño porque contienen propiedades y nutrientes que contribuyen de un modo u otro a que durmamos mejor o a sentirnos más predispuestos a descansar. Los frutos secos son alimentos infaltables en la dieta del sueño porque son ricos en magnesio, que es un mineral que incide positivamente en el manejo y regulación del estrés. Entre los frutos secos encontramos cacahuates, almendras, pistachos y anacardos. Por sus contenidos de Omega 3 y de triptófano, los pescados son también alimentos que deben ir incluidos en esta dieta. Atún, sardina, boquerón y la caballa son solo algunos de los pescados que puedes consumir. ¿Qué alimentos dificultan el sueño? Así como la dieta del sueño se compone de alimentos que contribuyen a que descansemos mejor, otros alimentos tendrán el efecto contrario y nos dificultarán descansar adecuadamente. Mencionaremos algunos de ellos ahora. Bebidas estimulantes tales como café, té, mate, cacao, guaraná, entre otras, impiden que conciliemos el sueño por contener sustancias conocidas como metilxantinas. No deberías consumir estas bebidas antes de dormir porque sus efectos se prolongan en el tiempo. Evita comer comidas muy picantes o especiadas porque ellas aumentan la temperatura corporal y la secreción de jugos gástricos, dificultando así el sueño De la dieta del sueño deberías excluir también las bebidas alcohólicas porque ellas pueden probar apnea del sueño e incluso insomnio. Aunque el alcohol es un depresor del sistema nervioso central, ofrece un sueño poco reparador para nosotros. Si aplicas la dieta del sueño con efectividad y rigurosidad, sus efectos no tardarán en expresarse en tu hábito de descanso, así como en tu rendimiento diario en diversos aspectos de tu vida. (EDNY)