Cristina Fernández reapareció el 27 de abril en la escena política argentina en Quilmes, donde pronunció un discurso en el que criticó con severidad las políticas de Javier Milei, quien, dijo, está sometiendo a los argentinos a un "sacrificio inútil" en materia económica.
También lo acusó de no tener un plan de estabilización y manipular los datos de déficit fiscal de la nación sudamericana.
"Respecto de otros de sus discursos [de Cristina Fernández], el de ayer ha sido un discurso muy pobre. Ella siempre en sus discursos había seguido un modelo, una estructura formal más clara. En ese carece de una forma orgánica de presentar un tema, o sea, padece de una pobreza intelectual notoria", mencionó Milei en una entrevista con Radio Rivadavia.
De acuerdo con Milei, la oposición en Argentina está nerviosa por los buenos resultados que ha logrado su Gobierno en el combate a la inflación.
"Lo que los argentinos consideraban como el principal problema del país está encontrando una solución", dijo el presidente, quien se autodefine como "anarco-capitalista", pero que el sábado fue calificado por Fernández como "anarco-colonialista".
Milei también señaló que, en Argentina, las expectativas favorables ya le ganan a las desfavorables y eso se manifiesta, dijo, en los altos índices de aprobación de su persona y su Administración.
"Si hoy fuéramos a una elección sacaríamos 54% de los votos", comentó el presidente de Argentina.
Añadió que, en un contexto de esas características, Fernández de Kirchner "necesita reagrupar a toda la tropa".
"Es un esfuerzo desesperado para tratar de unirse y que no entren en un camino que les complique aún más sus performances electorales. Es un acto desesperado por mantener vivo un movimiento político que tanto daño le ha hecho al país", afirmó Milei.
"La verdad es que necesitamos que se vuelvan más racionales, no de tratar de sostenerse aferrándose a la economía del planeta de los simios, por decirlo de una manera educada", concluyó.