El líder alemán declaró que "es mejor concentrarse en el camino que la OTAN ha acordado desde hace tiempo", al referirse al porcentaje de gasto en defensa acordado hace años del 2%.
"Es mucho dinero. Y esto significa realmente que tendríamos que ahorrar 150.000 millones [de euros] o endeudarnos con 150.000 millones al año o una mezcla de ambas cosas", señaló Scholz en una entrevista con el medio Focus Online, luego de que le pidieran su opinión sobre la propuesta de Trump.
Según el canciller, el 5% del PIB de Alemania significaría unos 200.000 millones de euros cada año (alrededor de 206.000 millones de dólares), de un presupuesto total de 490.000 millones de euros.
Y aunque reconoció que Berlín sí debe "hacer más por la seguridad", aclaró que su país ha casi duplicado su gasto anual en defensa a unos 80.000 millones de euros.
Antes, el ministro alemán de Economía, Robert Habeck, calificó la exigencia de Trump de "poco realista".
En ello coincide Ian Lesser, integrante del grupo de expertos German Marshall Fund, quien dijo a varios medios internacionales que "es completamente irreal imaginar que prácticamente todos los aliados de la OTAN lleguen al nivel del 5%, al menos a corto plazo".
Los países de la OTAN acordaron en una cumbre en Vilna en 2023 gastar al menos el 2% del PIB en defensa. Actualmente, 23 de los 32 miembros de la Alianza Atlántica gastan el 2% o más de su PIB en este rubro.
En julio pasado, el ex secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseguró que los países miembros del bloque cumplirán su promesa de gastar el 2% de su PIB o más en materia de defensa, como lo había pedido Estados Unidos.
"Los aliados de la OTAN van a aumentar este año el gasto en defensa en un 18%. Se trata del mayor aumento en décadas", dijo en aquel momento. "Veintitrés aliados van a gastar este año el 2% del PIB o más en defensa", agregó. Según él, eso supone más del doble que hace cuatro años.
"También es importante que Estados Unidos sepa que gran parte de este dinero se gasta aquí. Los aliados compran cada vez más equipos a Estados Unidos", comentó.
En 2014, las naciones que integran el bloque militar occidental se comprometieron con Washington a gastar esa proporción de dinero en defensa. Sin embargo, solo tres países cumplieron el objetivo: Estados Unidos, el Reino Unido y Grecia.
Alemania debe llevar a cabo una política independiente de Estados Unidos ante la llegada al poder del presidente electo estadounidense, Donald Trump, y rechazar el despliegue de misiles estadounidenses en su territorio, declaró la jefa del partido político alemán Alianza Sahra Wagenknecht—Por la Razón y la Justicia, Sahra Wagenknecht.
"No debemos dejar que Trump nos chantajee. Alemania necesita una política independiente. Por eso, el futuro Gobierno federal debe rechazar el despliegue de misiles estadounidenses de medio alcance [en Alemania], concedido por [el canciller Olaf] Scholz, sobre cuyo despliegue decidiría Donald Trump. Esta sería la primera manifestación valiente de soberanía", manifestó Wagenknecht en declaraciones para el portal de noticias T-online.
Añadió que la llegada de Trump a la Casa Blanca debería "conmocionar" a Alemania y hacerle comprender que sus intereses difieren de los de EEUU, mientras que "seguir ciegamente las órdenes estadounidenses" es perjudicial para el país. Las sanciones destruyen la industria europea y la exigencia de Trump de un gasto en defensa del 5% del PIB implica a Berlín en la carrera armamentística.
"[La afirmación de Trump] sobre la capacidad de obtener materias primas y rutas de transporte, que EEUU necesita, con poder militar, ya sea en Groenlandia, Panamá o Canadá, muestran, hacia dónde va el asunto. Los planes de Trump de imponer aranceles también están dirigidos en gran medida contra nosotros", declaró.
Wagenknecht indicó que Alemania ha sustituido su dependencia del gas ruso por la del gas estadounidense, mucho más caro, y añadió que las materias primas y el combustible deben comprarse donde sean más económicos.
En julio, Estados Unidos y Alemania anunciaron que Washington comenzaría en 2026 el despliegue en Alemania de capacidades de fuego de largo alcance, incluidos los misiles de crucero SM-6, misiles de largo alcance Tomahawk y los misiles hipersónicos en desarrollo.
A la Unión Europea le preocupa que Trump vuelva a su política proteccionista y aumente los aranceles a los productos europeos. Ya ha prometido una subida arancelaria del 10% para los productos chinos y ha dicho que, cuando entre en funciones el 20 de enero, adoptará una decisión sobre aranceles del 25% para todos los productos mexicanos y canadienses.