Las declaraciones que este viernes emitió la consellera de Innovación, Industria y Turismo de la Comunidad Valenciana, Nuria Montes, han despertado gran indignación en redes por la falta de empatía con las víctimas de la tragedia que, hasta ahora, ha dejado más de 200 muertes en el suroeste de España.

"Aquí no se van a entregar a cuerpos a familias, no se va a permitir el acceso de familiares a la zona donde tenemos custodiados a todos los fallecidos, así que tienen que esperar, de forma obligatoria, la llamada del juzgado y la entrega de la documentación pertinente", dijo Montes en declaraciones a medios.

La funcionaria se refería al recinto, conocido como la 'Fira de València', que desde el jueves por la noche se habilitó para albergar los cuerpos de las víctimas mortales de la histórica DANA que afectó severamente a esa provincia. 

Montes hizo un llamado expreso a la población a que no se acerque a la morgue provisional, con una zona de 1.200 metros, mientras Valencia sigue en shock por el impacto de las mortíferas inundaciones. 

"Las familias en el mejor lugar donde pueden esperar las noticias de sus familiares es en sus domicilios", aseveró la funcionaria. Sus palabras han provocado amplio rechazo en redes sociales, por considerar que tiene "cero empatía" para con los sobrevivientes y las personas que perdieron a un allegado durante la tragedia.

"Es difícil dirigirse a la ciudadanía con más crueldad", apuntó una usuaria. "Un poquito de humanidad en la comunicación no le vendría mal, aseveró otra. 

"La insensibilidad y el autoritarismo que se desprende de la Consejera Nuria Montes con las víctimas contrasta a la opacidad en cifras de muertes y desaparecidos. Ni está a la altura de las circunstancias y debería plegarse ya mismo. Todo el Gobierno, de hecho. No lo merecemos", puntualizó otra persona.

Con el pasar de las horas, las críticas a las autoridades de la Comunidad Valenciana, en manos del conservador Partido Popular (PP), se multiplican. La falta de avisos a tiempo, la aparente subestimación del fenómeno y la eliminación de la Unidad Valenciana de Emergencia, por parte del presidente regional, Carlos Mazón, han provocado una gran consternación, que se incrementa mientras sigue en ascenso la cifra de muertos y desaparecidos.