Datos del Departamento del Tesoro de EEUU publicados el 29 de julio mostraban que la deuda nacional bruta superaba los 35 billones de dólares. Esta cifra equivale a una deuda de 104.497 dólares por persona en Estados Unidos.

"Aquí estamos de nuevo: el Tesoro de Estados Unidos ha confirmado hoy que hemos añadido oficialmente otro billón de dólares a la deuda nacional bruta. Si esto te suena familiar, acabamos de alcanzar los 34 billones de dólares justo a finales de 2023. Pasamos los 33 billones de dólares tres meses antes de eso y los 32 billones de dólares tres meses antes de eso. El endeudamiento sigue avanzando, temerario e inflexible" declaró en un comunicado Maya MacGuineas, presidenta del Comité para un Presupuesto Federal Responsable, organización no partidista.

Como lo declaró MacGuineas, la deuda de Estados Unidos ha ido aumentado de billón en billón en muy poco tiempo, pues pasó de 32 billones a mediados fue 2023 a 35 billones a mediados de 2024; es decir, en alrededor de 12 meses.

Apenas en junio, la Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO, por sus siglas en inglés) advirtió a los estadounidenses que la deuda pública del país norteamericano va camino de alcanzar un nuevo récord de participación en la economía en tres años.

La CBO, que no es partidista, ha proyectado que la deuda pública alcanzará un nivel récord de más del 106% del PIB en 2027, superando un récord de casi 80 años establecido en 1946, cuando Estados Unidos se encontraba en plena desmovilización tras la Segunda Guerra Mundial.

La deuda pública es una métrica favorecida por los economistas que excluye la deuda mantenida en cuentas intragubernamentales como los fondos fiduciarios de la Seguridad Social.

Ante estos números, MacGuineas asegura que los estadounidenses deberán ponerse serios con los niveles de deuda, pues es uno de los principales peligros a los que se enfrentan.

"Vamos a tener que ponernos serios con la deuda, y pronto. Los años electorales no pueden ser una excepción para intentar prevenir peligros totalmente previsibles, y la deuda es uno de los principales peligros a los que nos enfrentamos", concluye MacGuineas.

Song Guoyou, subdirector del Centro de Estudios Estadounidenses de la Universidad de Fudan, aseveró que"debemos estar alerta ante la posibilidad de una crisis financiera en Estados Unidos, o incluso una crisis económica derivada de su creciente deuda".

En tanto, Ma Wei, investigador del Instituto de Estudios Estadounidenses de la Academia China de Ciencias Sociales, dijo que las crecientes preocupaciones del mercado sobre la deuda han hecho que muchos pierdan la confianza, y han comenzado a reducir sus tenencias en los últimos años.

Los mercados emergentes, explicó Ma, son particularmente vulnerables, ya que el posible aumento de los rendimientos elevará indirectamente los costos del servicio de su deuda, señalando que estos países enfrentan los peligros de devaluaciones de la moneda, salidas de capital y desequilibrios en sus pagos internacionales debido al abuso de la hegemonía financiera de Estados Unidos.