La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, arremetió este martes contra el presidente francés, Emmanuel Macron, por la polémica apertura de los Juegos Olímpicos, interpretada como una aparente parodia de la 'Última Cena', y lo acusó de convertir el país europeo en una nación "anticristiana".

Si Francia "fue alguna vez la nación más cristiana del mundo", ahora "el régimen de Macron se convirtió en un estado impío", de tal forma que ha pasado de ser un país "archicristiano" a convertirse en uno "anticristiano", expresó la vocera en su cuenta de Telegram.

En este sentido, Zajárova reiteró que antiguamente los reyes de Francia y el pueblo galo eran considerados "los más cristianos". "La nación francesa se mantuvo fiel al papa, incluso cuando ardía en llamas de la Reforma. Para ser rey en París los futuros monarcas se convertían al catolicismo", señaló Zajárova, agregando que los "descendientes de los francos mantenían ese título durante siglos". Asimismo, mencionó las figuras del emperador Napoleón Bonaparte y del presidente Charles de Gaulle, del que apuntó que, a pesar de ser "un dirigente laico", "daba mucha importancia al cristianismo".

"Si [Charles de Gaulle] supiera qué espera a Francia en el primer cuarto del siglo XXI, maldiría a los que se atrevieron a burlarse del país", manifestó.

Finalmente, calificó la controvertida representación artística de la ceremonia inaugural, de "ultraje público al cristianismo" y de "continuación lógica de la cruzada de París contra sí mismo".