Según informaciones de la emisora France Info, la decisión de requisar a basureros huelguistas se tomó el miércoles por la noche tras un intercambio de cartas entre el prefecto de policía, Laurent Nuñez, y la alcaldesa socialista de París, Anne Hidalgo.
Hidalgo había anunciado que no daría curso a la petición del prefecto de requisar a los basureros en huelga, alegando que correspondía al Estado restablecer el diálogo social. Ante esta negativa, Nuñez se sustituye al Ayuntamiento. Para proceder a las requisas, pidió al Ayuntamiento que le enviara los nombres de los agentes afectados.
"VIOLACIÓN DEL DERECHO DE HUELGA"
En su carta, el prefecto de policía sólo menciona la recogida de residuos. Sin embargo, tres incineradoras de la región Isla-de-Francia, de Sytcom (sindicato paritario de valorización de residuos), están paralizadas: las de Ivry-sur-Seine, Issy-les-Moulineaux y Romainville están bloqueadas por piquetes.
En un comunicado, el sindicato CGT promete una "respuesta bajo múltiples formas" si el prefecto de policía de París requisa al personal en huelga. Considera "cualquier violación del derecho de huelga como una agresión contra los huelguistas y sus piquetes".
El Ayuntamiento de París calculó que unas 7.000 toneladas de residuos no fueron recolectadas en esta semana de huelga. "Apoyamos la movilización", declaró Emmanuel Grégoire, primer vicealcalde de París, en rueda de prensa.
La huelga de basureros en París se ha prorrogado hasta el 20 de marzo. (rfi)