La UCI retomó así los niveles de fines de 2021 (64 por ciento) y dejó atrás la dinámica ascendente de la primera mitad de 2022, hasta el máximo de 69,6 por ciento en agosto. Estos datos van de la mano con las estadísticas sobre producción industrial manufacturera que muestran una tendencia contractiva desde mediados de 2022.

La UCI brinda un panorama más estructural sobre la situación en la industria. Los datos surgen de una encuesta que el Indec realiza desde 2004 a un panel de entre 600 a 700 empresas. Los años más críticos del relevamiento fueron 2020 y 2019, años de crisis. La UCI por entonces promediaba el 57,7 por ciento. Los niveles actuales dan cuenta de una recuperación del tejido industrial respecto de aquellos años, pero una mirada más de corto plazo permite identificar una desaceleración en el uso de las instalaciones industriales.

La UCI se calcula como promedio de distintos sectores industriales, entonces es posible distinguir cuáles operaron por encima o por debajo del promedio en diciembre. El primer grupo es liderado por la refinación del petróleo, con una UCI de 85,1 por ciento, y las industrias metálicas básicas, con 81,3. Al igual que el mes anterior, la producción de petróleo crudo es la causante del mayor dinamismo en el sector. Las metálicas básicas vienen creciendo hace meses por el impulso de la producción de acero. 

También se ubicaron arriba del promedio las sustancias y productos químicos y la fabricación de productos minerales no metálicos, con UCIs del 70 por ciento. Luego está la producción de papel y cartón con 67,6 por ciento en diciembre, y el sector de alimentos y bebidas, con una UCI del 63,9 por ciento, algo inferior a 2021 debido a una menor utilización de las plantas de molienda de oleaginosas y de las elaboradoras de cervezas, informó el Indec.

En tanto, por debajo del promedio se encuentran con una UCI en torno al 53 por ciento las ramas de la metalmecánica excepto automotores, la elaboración de productos de tabaco y la edición e impresión, este último por una menor demanda del sector alimenticio. Luego, los productos de caucho y plástico tuvieron una UCI del 47,2 por ciento, inferior a los registros de 2021, como consecuencia de una menor fabricación de manufacturas de plástico y de neumáticos. La industria automotriz y el sector textil se ubicaron en lo más bajo del ranking con una UCI del 44 por ciento. En el primer caso marcó un mes particularmente negativo para el sector aunque los datos de todo 2022 fueron más que favorables. La industria textil, por su parte, computó una retracción en el volúmen de producción de tejidos. (Página 12)