La Moncloa está decidida a hacer pedagogía con las medidas impulsadas por el Consejo de Ministros desde el inicio de la crisis socioeconómica como consecuencia de la guerra en Ucrania. Por eso la orden a ministros y cargos del PSOE es exhibir, explicar y presumir las medidas en cada intervención, de cara a que reporten réditos políticos en las próximas elecciones municipales y autonómicas. Pedro Sánchez se pone al frente de esta estrategia.
El presidente del Gobierno ha aprovechado su comparecencia en el Congreso para desgranar todas estas medidas y contraponerlas con las puestas en marcha por el PP hace una década con motivo de la crisis financiera, mientras la oposición ha criticado su "triunfalismo" y también que los eurodiputados socialistas votaran en contra la semana pasada de una resolución para instar a Marruecos a respetar la libertad de expresión y prensa.
"En Europa, hoy España exporta soluciones frente a la crisis energética y de precios. Hace 10 años, importábamos rescates a bancos quebrados y recortes en nuestro Estado del Bienestar". La frase resume el planteamiento con el que el jefe del Ejecutivo ha acudido al Congreso. Aprovechar el foco para desgranar de manera pormenorizada medidas y contraponerlo con el PP, pero usando para ello las decisiones que hace 10 años tomaron los populares, en plena crisis financiera mundial.
Sánchez mira al pasado para tratar de tomar impulso ante un escenario demoscópico en el que todas las encuestas, salvo el CIS, dan la victoria al PP. La Moncloa quiere que la situación en Cataluña sea un activo electoral en este ciclo electoral de 2023, y que el "ruido" que tanto molesta al presidente del Gobierno no opaco un objetivo claro que se ha marcado, a él y a los suyos: machacar con el mensaje de que no hay un solo español que no se haya beneficiado de sus medidas: reforma laboral, ayuda a los hidrocarburos, bajada del IVA de alimentos básicos y de la luz, la excepción ibérica, subida del salario mínimo, límite a la subida del alquiler...
"Son medidas que unen a España", ha presumido Sánchez desde la tribuna. "Y la unen de un modo distinto al que algunos proclaman desde distintas plazas de Madrid y que creen que tienen la exclusiva de la Constitución y el patriotismo". Una clara alusión a la reciente manifestación en Madrid, convocada por la sociedad civil, pero a la que acudieron cargos del PP, Vox y Cs. "El mejor patriotismo es el que reduce la desigualdad y la brecha salarial".
CRITICAS DE LA OPOSICIÓN
Por su parte, el PP ha censurado el "triunfalismo" del presidente afeándole la subida de la inflación, las hipotecas y el recibo de la luz, los datos del paro y que sus medidas sociales y económicas les vayan a costar a las próximas generaciones "200 millones de euros al día en deuda". "Sus políticas son erráticas y su gestión caótica. Éste es el balance de un Gobierno que afortunadamente para los españoles entre ya en tiempo de descuento; es decir, son ustedes un pato cojo, como dirían en EEUU", ha señalado la portavoz del principal grupo de la oposición en el Congreso, Cuca Gamarra.
Además, el partido de Alberto Núñez Feijóo ha criticado el "papelón" de los eurodiputados socialistas que votaron en contra de una resolución para instar a las autoridades marroquíes a "respetar la libertad de expresión y prensa y garantizar a los encarcelados un juicio justo con las debidas garantías procesales". "Por cierto, ¿con quién se quedaron ustedes? Con Le Pen. Y todo con una reunión a la vista en la que veta la presencia de la mitad de su Gobierno", ha añadido Gamarra en alusión a la ausencia de Unidas Podemos de la cumbre de Rabat de la semana que viene.
El PP también ha insistido en la necesidad de que todas las fuerzas políticas apoyen una iniciativa para rectificar las penas que han sido rebajadas en aplicación de la ley del sólo sí es sí y que "ningún agresor tenga condena inferior a la que hubiera tenido con el anterior Código Penal". Y, tras la derogación del delito de sedición y la reforma del de malversación, advierten que el Gobierno ha "garantizado" a ERC la celebración de un referéndum ilegal después de las elecciones.
Para Vox, lo ocurrido la última semana en el Parlamento Europeo y en el Foro de Davos son prueba suficiente de que el Gobierno, y en especial Sánchez, deben dar más explicaciones a la ciudadanía acerca de qué hay detrás de sus decisiones. "Es una mezcla de autocracia en el interior y sumisión en el exterior", ha definido Santiago Abascal, en referencia a la mala gestión, evidenciada en el plan anticrisis aprobado este martes, y el cambio en la postura de España sobre el Sáhara "que todavía no ha explicado" el presidente a la ciudadanía.
"Nadie puede fiarse de usted. No hay gobierno comprometido con Ucrania y su soberanía que pueda fiarse de usted. Genera desconfianza fuera de nuestras fronteras", ha lamentado el presidente de Vox sobre la posición del sector de Unidas Podemos en el Consejo de Ministros acerca de enviar material defensivo militar a Kiev.
De hecho, en Vox consideran que el Gobierno se blinda en su "relato" por encima de las medidas, especialmente en este curso doblemente electoral. Así, Abascal ha denunciado el "marketing de líder norcoreano" que exhibe Sánchez "jugando a la petanca con sus afiliados" esta pasada semana en Coslada, tras los "aplausos de los multimillonarios" en Davos y los "abucheos" de las clases trabajadoras en cualquier punto de España. (EFE)