Para lograrlo, existen novedosos tratamientos en el mercado que pueden ayudarnos a perder esos centímetros de más en áreas conflictivas, como el Coolsculpting, una avanzada técnica que realizan en exclusiva en la clínica Carmen Sarmiento de Sevilla.
El Coolsculpting es un tratamiento no invasivo que consiste en modelar el cuerpo haciendo uso de avanzada tecnología. Gracias a esta técnica se pueden congelar de forma controlada las células de grasa que se quieren eliminar sin dañar el tejido circundante.
Se trata de una técnica completamente segura y muy eficaz autorizada por la FDA. De hecho, es la técnica número 1 en el mundo para la eliminación de grasa de forma no invasiva.
Este tratamiento está indicado tanto para mujeres como para hombres que deseen reducir grasa localizada en ciertas zonas de su cuerpo.
Esta técnica es una buena alternativa a la liposucción. A través de la congelación de los adipocitos o células grasas se conseguirá reducir volumen de forma natural.
A través de esta técnica, se aplica frío a las zonas corporales en las que se concentra más cantidad de grasa, congelándola. Una vez congeladas, las células mueren y se eliminan en el transcurso de unas pocas semanas (entre 1 y 3 semanas) de forma natural. Además, el resto de los tejidos no sufrirán ningún daño con esta técnica, ya que los adipocitos son más susceptibles al frío que el resto de los tejidos.
En el Coolsculpting no se utilizan agujas ni se utiliza cirugía. De esta forma, el paciente solo percibirá una ligera presión y sensación fría que desaparecerá en unos minutos. Así, de forma no invasiva y rápida se podrá eliminar hasta un 20 % de la grasa corporal.
Las sesiones de Coolsculpting suelen durar entre 35 y 60 minutos. Por otro lado, en cuanto al número de sesiones necesarias para lograr los resultados deseados, este dependerá de cada paciente.
De este modo, esta técnica se configura como un tratamiento completamente personalizado para cada paciente, aunque lo habitual es necesitar más de una sesión para lograr reducir el volumen que el paciente desea. No obstante, el paciente comenzará a ver resultados desde la aplicación de la primera sesión.
El Coolsculpting no tiene efectos secundarios, si bien algunos pacientes pueden notar algo de hinchazón, rojeces o la zona tratada ligeramente dolorida tras el tratamiento. No obstante, lo cierto es que casi todos los pacientes relatan una experiencia positiva, tanto durante como después de la aplicación de esta técnica.
Sin duda, el Coolsculpting es una gran alternativa a métodos de reducción de grasa más invasivos como la liposucción. Sus resultados son muy visibles y se trata de una técnica segura y eficaz. (NCYT)