La consultora Scentia reportó en abril un alza de 4,7 por ciento en el consumo masivo, lo que representa el décimo mes consecutivo de crecimiento en el gasto de los hogares. Aún en un escenario de precios muy elevados, ese indicador muestra niveles que no se daban desde el año 2004. El estudio, que mide las ventas en todos los canales (hipermercados, chino, almacenes y comercios de cercanía), precisó además que la mejora se da con mucha más fuerza en el interior del país que en el Área Metropolitana de Buenos Aires.
Desde julio del 2021 a hoy, el consumo no se detuvo, y en la parte más caliente de la inflación, la primera parte de este año, tuvo un crecimiento fuerte: fue de 9,9 en febrero, de 3,7 en marzo y de 4,7 en abril, período en el que se suponía que la pendiente a la baja debía profundizarse por un alza de precios más importante. El 4,7 de abril se explica por un crecimiento de 9,3 en el interior y una caída de 1,2 en el AMBA. El sector que más empuja la demanda son los comercios chicos y de cercanía: crecieron 7,5 contra 1,7 de las grandes cadenas. En paralelo, el gasto en los comercios chicos del interior del país creció más del 14 por ciento.
Según Scentia, esto se explica en parte por impacto de la Semana Santa. La lectura es parcial porque el síntoma del interior empujando más tiene, por lo menos, tres o cuatro meses seguidos mostrándose. En el detalle por rubros, en los grandes super crecieron todas las compras menos las de productos de limpieza de ropa y hogar, que se contrajeron 4,7 por ciento. Em cambio, en los comercios de barrio, crecieron todos los rubros y no cayó ninguno. Una curiosidad: lo que más se vendió es el rubro "Impulsivos", con alzas superiores al 35 por ciento. Son los productos (caramelos, chocolates, etc), que se consiguen al lado de las cajas donde se paga.
Por otra parte, una explicación válida de por qué el consumo sigue más fuerte en el interior, son los precios. Los aumentos en el AMBA han sido más fuertes y, además, es una zona con fuerte dispersión en los valores. Lo llamativo es que, aún sin Precios Cuidados, con valores 30 por ciento más caros y poco control del Estado, el consumo sigue más fuerte en los comercios barriales que en los hipermercados. (Página 12)