El expresidente Donald Trump, con el objetivo declarado de regresar a la Casa Blanca en 2024, enfrenta al menos 10 demandas y sus abogados están tratando de retrasar las audiencias.
Trump debe responder una serie de preguntas bajo juramento.
El republicano está siendo acusado, entre otras cosas, de que sus guardias de seguridad golpearon a manifestantes frente a la Trump Tower en Nueva York hasta demandas por difamación por parte de la ex concursante de "Apprentice", Summer Zervos y por el motín del 6 de enero en el Capitolio.
En todos los casos, se trata de litigios civiles que Trump está observando como se aceleran después de dejar la presidencia en enero de 2020.
Fuentes locales indicaron hoy que hay al menos 10 casos civiles pendientes contra Trump, cuya capacidad para retrasarlos se ha visto restringida desde que dejó la Casa Blanca.
Trump había argumentado en algunos de los casos que, como presidente en ejercicio, era inmune a las demandas civiles. Sin embargo, y para tratar de poner obstáculos a sus intenciones de regresar al gobierno, todo está cambiando y las demandas comenzaron a acelerarse.
Zervos, concursante de la quinta temporada del reality "The Apprentice", que conducía Trump antes de llegar a la presidencia, alega que el magnate la calumnió al llamarla "mentirosa" durante su campaña presidencial de 2016.
La mujer lo había acusado entonces de haberla acosado y manoseado cuando buscaba asesoramiento profesional en 2007, un año después de su aparición en el programa.
Los abogados de Trump están planeando presentar una contrademanda.
En una declaración en la corte este mes, el secretario legal del juez informó que todas las deposiciones deben ser completadas antes del 23 de diciembre.
"El acusado ahora es un ciudadano privado, y simplemente no puede retrasar más este litigio", dijo la abogada de Zervos, Moira Penza.
Los abogados de Trump podrían presentar en las próximas horas una serie de documentos judiciales para fijar una fecha para su deposición.
Al mismo tiempo, los abogados de los manifestantes que alegan que los guardaespaldas de Trump los agredieron durante una manifestación en 2015, se preparan para interrogar a Trump.
Trump dijo en una declaración jurada en 2016 que no tenía conocimiento del altercado y que no estaba directamente involucrado en la contratación de personal de seguridad.
Sus abogados trataron de evitar que testificara durante años, incluso mientras era presidente, pero el juez dijo ahora que su testimonio es "indispensable".
Al igual que Zervos, E. Jean Carroll está demandando a Trump por difamación, alegando que la calumnió al acusarla de inventar acusaciones de agresión sexual.
Carroll alega que Trump la acosó durante un encuentro casual en una tienda departamental de la ciudad de Nueva York a mediados de la década de 1990.
Trump respondió: "Ella no es mi tipo" y "nunca sucedió". La acusó de haber inventado la historia para vender sus memorias en 2019.
La Corte de Apelaciones del Segundo Circuito escuchará los argumentos en diciembre.
Trump, sus hijos Eric, Don Jr. e Ivanka, y su compañía también están siendo demandados en el mismo juzgado por un grupo de personas que afirman que la familia los engañó para que hicieran inversiones, que terminaron mal, en negocios que promovían los Trump.
Trump y otros miembros de la familia, además, enfrentan una demanda por fraude de su sobrina Mary Trump, quien alega que la estafaron con millones de dólares de la herencia de su abuelo.
"Para Donald J. Trump, su hermana Maryanne y su difunto hermano Robert, el fraude no era solo un negocio familiar, era una forma de vida", dice su demanda ante la Corte Suprema de Nueva York.
La demanda alega que el trío le estafó de su parte justa de la herencia de su abuelo.
Al mismo tiempo, Trump ha sido golpeado con al menos cuatro demandas de legisladores demócratas y agentes de la policía del Capitolio por el sangriento motín del 6 de enero en el Capitolio en Washington DC, que interrumpió el conteo oficial de votos electorales para confirmar el triunfo de Joe Biden.
Las demandas alegan que Trump y otros acusados violaron la Ley del Ku Klux Klan de 1871. La ley fue establecida para "proteger contra conspiraciones, a través de la violencia y la intimidación, que buscan evitar que los miembros del Congreso cumplieran con sus deberes oficiales".
Los abogados de Trump sostuvieron que él es inmune a los reclamos porque era presidente en ese momento y que su discurso en un mitin en la mañana del 6 de enero estaba protegido por la Primera Enmienda. (ANSA).