“Es el momento de terminar con el letargo y crear una relación entre los pueblos de América, sustituir la política de bloqueos y maltratos, y caminar juntos y asociarnos para el bien de América sin vulnerar nuestras soberanías”, dijo la mañana de este sábado.

Dentro de este marco, López Obrador pidió a su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, y al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, que destinen recursos en beneficio de la región para reducir la desigualdad y la violencia.

Argumentó que atender estos asuntos es necesario pues son las causas de los problemas sociales y los flujos migratorios.

Al inaugurar la sexta cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), el mandatario mexicano solicitó a Estados Unidos y a Canadá apoyar a la región con vacunas contra el COVID-19, dado que, a más de un año y medio de pandemia, muchas naciones no han tenido acceso a estas.

“Estoy seguro de que el presidente Biden, el primer ministro de Canadá, estarán atentos a las propuestas de consenso que tengamos en este foro para actuar por el bien de nuestros pueblos”, dijo López Obrador.

El jueves, en el desfile por el 211 aniversario de la independencia de México, López Obrador pidió a Biden levantar el embargo económico de Estados Unidos a Cuba, cuyo presidente, Miguel Díaz-Canel, asistía a la ceremonia como invitado especial.

Al encuentro de este sábado, en el que se prevé que se discutan posibles ajustes a la Organización de los Estados Americanos (OEA), no asisten los presidentes de Brasil, Jair Bolsonaro; de Argentina, Alberto Fernández, y de Colombia, Iván Duque.

El presidente consideró que la Celac puede convertirse en el principal instrumento para consolidar las relaciones entre las naciones y alcanzar el ideal de una integración económica con Estados Unidos y Canadá, similar al esquema que se tiene dentro de la Unión Europea (UE).

“Es nuestro sentir que este ideal puede convertirse en realidad si pensamos y acordamos sobre tres cuestiones básicas: la no intervención y la autodeterminación de los pueblos, la cooperación para el desarrollo y la ayuda mutua para combatir la desigualdad y la discriminación”, expresó.

El jefe del Poder Ejecutivo argumentó que debe haber compromiso de los gobiernos por no imponerse a otros y que las controversias sobre democracia y derechos humanos pueden resolverse a petición de las partes en instancias neutrales, con ayuda de agencias especializadas de la ONU.

También consideró que con Estados Unidos y Canadá puede trabajarse para fortalecer el mercado interno de la región y competir con otros como el de Asia. (Expansión)