A medida que la economía china se integre con el resto del mundo, las entidades del mercado utilizarán el yuan para fines transfronterizos. Aunque en el marco del llamado plan de "doble circulación", la globalización del yuan tiene como objetivo último servir a la economía real, el comercio y la inversión de China, dijo la presidenta del Banco de Exportación e Importación de China, Hu Xiaolian.

"Ahora que China desarrolla un nuevo paradigma caracterizado por su modelo de 'doble circulación', la globalización del yuan tiene una base aún más sólida", dijo Hu citada por el diario SCMP.

El plan de "doble circulación" de China se centra más en el mercado nacional y es el enfoque estratégico de China para adaptarse a un mundo exterior. Este enfoque permitirá al país asiático depender menos de su estrategia de desarrollo orientada a la exportación, sin abandonarla del todo.

Por el momento, la internacionalización del yuan se encuentra todavía en su fase inicial y está orientada a satisfacer las necesidades de pago de las importaciones del mercado interior chino, subrayó el medio.

La transición a una nueva etapa de globalización del yuan dependerá de una apertura más profunda y amplia de los mercados financieros de China, la realización de un mercado de capitales convertibles, así como de unos lazos más estrechos entre China y el resto del mundo, añadió Hu.

En el marco de su 14 plan quinquenal, China aspira a construir un mercado de capitales de varios niveles y a desarrollar los vínculos entre los mercados de capitales nacionales y extranjeros. Se prevé que esto apoye los flujos entrantes de yuanes desde el extranjero y proporcione a las entidades extranjeras un canal más ancho para la inversión y la financiación.

"A mediados de este siglo, China podría tener el mayor y más abierto mercado financiero del mundo para funcionar con las reglas y normas más inclusivas del mundo que promuevan la cooperación internacional", aseguró Hu.

Para el final de 2020, las entidades extranjeras tenían un 62% más acciones en yuanes y 47% más bonos en yuanes que el año anterior. El experto agregó que los flujos de capitales y las normas del mercado chino convertirían el yuan en la moneda más preferida del mundo para el 2050.

"Para entonces, es probable que el yuan sea la moneda preferida y pueda utilizarse libremente, al servicio del comercio y la inversión mundiales, al convertirse en una moneda fiable y de confianza", enfatizó.

Asimismo, la financiación verde también traerá nuevas oportunidades para la internacionalización del yuan, según el experto.

La adopción por parte de China de nuevas políticas para desarrollar su mercado de consumo interno le proporcionará una ventaja como comprador para apoyar las transacciones transfronterizas denominadas en yuanes, dada la enorme población de la nación y los crecientes niveles de ingresos, subrayó Hu.

Además, China hace hincapié en un tipo de cambio estable combinado con políticas macroeconómicas y monetarias estables, y esto impulsará la confianza en el yuan y ayudará a los extranjeros a aceptar la moneda para sus pagos, concluyó Hu.