La pandemia se ha cobrado ya más de 74.000 vidas en España, según los datos actualizados de exceso de mortalidad que recoge el Instituto Nacional de Estadística (INE), a partir de la información obtenida de los registros civiles de toda España. Esa cifra poco o nada tiene que ver con la que reconoce de forma oficial el Gobierno, que se sitúa en este momento en 45.511 fallecidos. La diferencia entre el dato oficial y el real es de casi 30.000 fallecidos. Pero el Gobierno se sigue negando a reconocer el número total de muertos desde que en marzo se declaró la pandemia por coronavirus. En concreto, el INE sitúa en exceso de mortalidad desde marzo en 74.738 personas. El exceso de mortalidad mide el número de fallecidos que hay en España por encima de lo previsto, a partir de la media de años anteriores. Las cifras oficiales solo están recogiendo los decesos de aquellas personas que se hicieron una prueba antes de morir y dieron positivo en Covid. La primera Comunidad Autónoma en número de fallecidos desde el principio de la pandemia es la Comunidad de Madrid, con un total 18.539 personas, seguida de Cataluña, con 17.086. Pero esos datos recogen la primera y la segunda ola. En la segunda, la Comunidad de Madrid ocupa ya uno de los últimos lugares en incidencia. Por su parte, este miércoles, el Sistema de Monitorización de la Mortalidad diaria, también conocido como MoMo, ha publicado un nuevo informe en el que desvela que, desde marzo, se han producido 67.709 muertes más de las esperadas (sea por la razón que sea, no solo por Covid-19); un resultado que cuadra más con los datos de exceso de mortalidad recogidos por el INE que con los ofrecidos por el Gobierno. Los cálculos previos del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) vaticinaban que entre el 10 de marzo de este año y el 9 de mayo morirían 66.654 personas (33.406 hombres y 31.644 mujeres); sin embargo, esta cifra fue ampliamente superada: se registraron 111.253 fallecimientos (55.815 hombres y 54.377 mujeres), 44.599 más de los previstos -lo que implica un incremento del 66,9%-. De todas estas muertes, 11.773 corresponden a personas menores de 65 años; 14.438, a gente que tenía una edad comprendida entre los 65 y los 74 años y 85.042, a personas mayores de 74. Aunque se tienen en cuenta defunciones por todas las causas, lo cierto es que las fechas elegidas coinciden con la primera ola de la pandemia del coronavirus en España. El segundo periodo de tiempo fijado por este estudio va del 20 de julio al 30 de noviembre, segunda ola del Covid-19 en el país. El MoMo estimaba que morirían 134.778 (67.830 hombres y 63.360 mujeres) personas pero, como ya ocurría en la anterior franja temporal, se produjeron más fallecimientos de los previstos: un total de 157.888 (80.844 hombres y 76.882 mujeres). Por tanto, fenecieron 23.110 personas más de lo que se pensaba en un principio -es decir, un 17,1% más-. En este caso, 22.094 de los fallecidos contaban con menos de 65 años; 21.775 tenían entre 65 y 74 años; 114.029 rebasaban los 74. A diferencia del análisis llevado a cabo por el INE, el informe del MoMo no estudia lo ocurrido a lo largo de todo lo que llevamos de año, sino que se centra solo en dos periodos muy concretos y ya mencionados más arriba. Si se juntan ambos registros, el resultado final es claro: España acumula 67.709 fallecidos más de los esperados desde marzo (según el INE, como ya se ha indicado también más arriba, la cifra asciende a 74.738). Aunque la previsión de que fallecieran más mujeres que hombres se ha cumplido, lo cierto es que el exceso de mortalidad -número de defunciones observadas por encima de las estimadas- ha sido mayor entre las primeras que entre los segundos. En su apartado de conclusiones, el documento reza: «En el periodo del 10 de marzo al 9 de mayo el exceso es superior en mujeres (72%) que en hombres (67%), y se concentra en los mayores de 74 años (78%), seguido del grupo de edad de 65 a 74 años (58%). En el periodo del 20 de julio al 30 de noviembre el exceso sigue siendo superior en mujeres (21%) que en hombres (19%), y continúa concentrándose en los mayores de 74 años (20%)». En cuanto al análisis por regiones, «se han detectado excesos de mortalidad en Andalucía, Aragón, Asturias, Islas Baleares, Canarias, Cantabria, Castilla y León, Castilla La Mancha, Cataluña, Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia, Murcia, Navarra, País Vasco y La Rioja. En ellas, el exceso de mortalidad se concentra en los grupos de edad de mayores de 74 y entre 65 y 74 años». (EFE)