El ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, anticipó que, si se confirman ilícitos, su cartera “llevará a la Justicia” las graves “irregularidades” detectadas en la gestión de Vialidad Nacional durante el gobierno de Mauricio Macri. Además, advirtió que la situación en ese organismo “es grave”, tanto por la falta de ejecución de obras como por el “sobredimensionamiento” con gerentes con sueldos exorbitantes . “Iremos a la Justicia y haremos las denuncias del caso donde encontremos situaciones que tienen que ser judicializadas”, aseguró el ministro durante una entrevista por AM 750 en la que confirmó que la gestión de Guillermo Dietrich creó “una estructura burocrática de cargos políticos con gerencias y funcionarios que estuvieron de los dos lados del mostrador”. El funcionario se hizo eco de una denuncia publicada el fin de semana por PáginaI12 que reveló que la gestión de Javier Iguacel, bajo el ala Dietrich, aumentó de 49 a 134 la cantidad de gerentes con sueldos de 230 mil pesos. Entre esos cargos hubo personas provenientes de empresas que habían sido contratistas del Estado y que, una vez en el cargo público, se autoadjudicaron licitaciones. Para Katopodis, esto es la prueba de que el macrismo obró “con mucha negligencia, permanente conflicto de intereses y poca transparencia”. “Ellos que vinieron con la bandera de la eficiencia y que nos venían a explicar cómo teníamos que hacer las cosas, fueron muy malos gobernando y gestionando”, criticó. “No hay ninguna justificación” de que el nombramiento de 85 gerentes en cuatro años “haya sido correcta, racional e inteligente ni que se haya justificado por un mayor ritmo de ejecución”, puntualizó el funcionario. Además, remarcó que “la situación de Vialidad es grave” no solamente por el “sobredimensionamiento de la estructura burocrática” sino también porque “no cumplió con ninguna de sus metas” de obras. Tal como lo consignó este diario, una auditoría interna hecha en esa dependencia demostró que la gestión de Guillermo Dietrich solo realizó el 13 por ciento de las obras prometidas, y que de los 4 mil kilómetros de rutas seguras anunciados no se concretó ninguno. “Se pasaron de marketing y grandes anuncios de megaproyectos que después no se concretaban”, indicó el ministro de Obras Pública, quien explicó que esta realidad también le fue confirmada “por intendentes y gobernadores”. Por otra parte, el funcionario anticipó que uno de los giros que le dará a la cartera que tiene a cargo será la promoción de obras de “infraestructura básica” que puedan quedar a cargo de cooperativas de trabajos y pequeñas empresas. La idea es promover tareas “en el entorno de los barrios”, así como también mantenimiento de rutas, saneamiento, conexiones de agua y cloacas a baja escala, enumeró el funcionario. Para que esto sea posible, añadió, se buscará “simplificar los procedimientos” para que esas pymes puedan “sortear umbral de restricciones” que conlleva un proceso licitatorio. “No se necesitan de grandes empresas para esas obras sino pequeñas empresas y cooperativas que tengan mano de obra intensiva”, definió. (Página 12)