El comunicado conjunto coronó una conferencia de dos días marcada por la ausencia de Rusia, que no fue invitada. Muchos asistentes expresaron su esperanza de que Rusia se una a la hoja de ruta hacia la paz en el futuro.

La guerra total desde la invasión de Ucrania por parte del presidente Vladimir Putin en febrero de 2022 ha matado o herido a cientos de miles de personas, ha perturbado los mercados de bienes como cereales y fertilizantes, ha expulsado a millones de sus hogares y ha abierto una brecha entre Occidente, que ha sancionado Moscú... y Rusia, China y algunos otros países.

Alrededor de 100 delegaciones, en su mayoría países occidentales, asistieron a la conferencia que fue anunciada como un primer paso hacia la paz. Entre ellos se encontraban presidentes y primeros ministros de Francia, Alemania, Gran Bretaña, Japón, Polonia, Argentina, Ecuador, Kenia y Somalia. También estuvo representada la Santa Sede y la vicepresidenta Kamala Harris habló en nombre de Estados Unidos.

India, México, Arabia Saudita, Sudáfrica, Tailandia y los Emiratos Árabes Unidos (representados por ministros de Asuntos Exteriores o enviados de menor nivel) estuvieron entre los países que no firmaron el documento final, que se centró en cuestiones de seguridad nuclear, seguridad alimentaria y intercambio de prisioneros. Brasil, un “observador”, no firmó, pero Turquía sí. China no asistió.

El documento final firmado por 78 países decía que la Carta de la ONU y "el respeto por la integridad territorial y la soberanía... pueden servir y servirán como base para lograr una paz integral, justa y duradera en Ucrania". Esto ha sido un fracaso para Putin, que quiere que Ucrania ceda más territorio y se aleje de sus esperanzas de unirse a la alianza militar de la OTAN.

Viola Amherd, la presidenta suiza, dijo en una conferencia de prensa que la "gran mayoría" de los participantes estuvo de acuerdo con el documento final, que "muestra lo que la diplomacia puede lograr". El ministro de Asuntos Exteriores, Ignazio Cassis, dijo que Suiza se acercaría a las autoridades rusas, pero no dijo cuál sería el mensaje.

El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, elogió los “primeros pasos hacia la paz” en la reunión y dijo que Ucrania estaba en conversaciones con algunos países, que no nombró, que se habían ofrecido a albergar una “segunda cumbre de paz”. No se estableció ningún calendario.

Zelenskyy acusó a principios de este mes a China, respaldada por Rusia, de intentar socavar la conferencia suiza, afirmación negada por Beijing.

Los aliados de Ucrania ahora enfrentan la tarea de intentar mantener el impulso hacia la paz. Zelenskyy dijo que los asesores de seguridad nacional se reunirían en el futuro y que después "habrá un plan específico".

Como prueba de la fatiga bélica y otras preocupaciones, sólo participaron aproximadamente la mitad de los países miembros de la ONU. Está muy lejos de marzo de 2022, cuando la condena de la invasión rusa llevó a la aprobación de una resolución no vinculante en la Asamblea General de la ONU por parte de 141 países que pedían que las tropas rusas abandonaran Ucrania.

No estaba claro por qué algunos países en desarrollo que asistieron no respaldaron la declaración final, pero pueden dudar en irritar a Rusia o haber cultivado un término medio entre Moscú, su aliado China y las potencias occidentales que respaldan a Kiev.

"Algunos no firmaron, aunque fueron muy pocos, ya que están jugando al juego 'Hagamos la paz basada en concesiones', y normalmente se refieren a concesiones por parte de Ucrania y básicamente a satisfacer las demandas rusas", dijo Volodymyr Dubovyk, un experto en Ucrania y miembro de alto rango. en el Centro de Análisis de Políticas Europeas, un grupo de expertos con sede en Washington. "También les gusta este posicionamiento de 'neutralidad'".

Dubovyk dijo que el camino a seguir para Ucrania era recibir ayuda (armas y asistencia humanitaria) que pudiera mejorar su situación sobre el terreno y así darle una mejor posición negociadora.

En el evento suizo, el desafío fue hablar duro con Rusia pero abrirle la puerta para unirse a una iniciativa de paz.

"Muchos países... querían la participación de representantes de la Federación Rusa", dijo Zelenskyy. "Al mismo tiempo, la mayoría de los países no quieren darles la mano (a los líderes rusos)... por lo que hay diferentes opiniones en el mundo".

Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión ejecutiva de la Unión Europea, dijo que la paz no se logrará en un solo paso y afirmó que Putin no se toma en serio el fin de la guerra.

“Él está insistiendo en la capitulación. Él insiste en ceder territorio ucraniano, incluso territorio que hoy no está ocupado por él”, dijo. “Él insiste en desarmar a Ucrania, dejándola vulnerable a futuras agresiones. Ningún país aceptaría jamás estos términos escandalosos”.

Los analistas sospechaban que la conferencia tendría poco impacto concreto para poner fin a la guerra porque Rusia no fue invitada . China y Brasil han buscado conjuntamente trazar rutas alternativas hacia la paz.

El primer ministro de Qatar, jeque Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, dijo el sábado que su rico país del Golfo organizó conversaciones con delegaciones ucranianas y rusas sobre la reunificación de los niños ucranianos con sus familias. Hasta ahora se ha logrado reunir a 34 niños.

El gobierno ucraniano cree que 19.546 niños han sido deportados o desplazados por la fuerza, y la comisionada rusa para los derechos del niño, María Lvova-Belova, confirmó anteriormente que al menos 2.000 fueron sacados de orfanatos ucranianos.

En Kiev, en una manifestación habitual de familiares de soldados capturados por Rusia, la respuesta a la reunión suiza fue silenciosa.

“Realmente me gustaría creer que esta (conferencia) tendrá un impacto, pero algunos países muy importantes no firmaron el comunicado”, dijo Yana Shyrokyh, de 56 años, cuyo hijo, militar, está en cautiverio desde 2022. “Realmente me gustaría "Les gustaría encontrar poderosas palancas de influencia en Rusia".